Llegada la navidad hay que pensar en los regalos para los más allegados. Está la carta a los Reyes Magos (Aquí no puedo utilizar lenguaje inclusivo porque eran Reyes y no Reinas aunque seguramente fueron sus Reinas quienes les dijeron llevad oro, incienso y mirra).

Se puede juntar con otras tradiciones como Papá Noel (importado), Olentzero (País Vasco), Tió de Nadal (el tronco catalán que caga regalos) u otras que desconozco o se me olvidan. Incluso en algunos casos la cosa se complica cuando hay cumpleaños en dichas fechas.

Cuando se trata de los más pequeños y pequeñas de la casa solemos intentar regalar con la máxima generosidad. Vamos, que si sumamos todas las opciones de familiares y eventos para regalar los niños y las niñas pueden juntarse con una buena cantidad de regalos que en algunos casos hasta resulta excesiva (Contando sólo dos regalos por familia de padre-madre, abuelo-abuela y un tío-tía regalando en Navidad por Papá Noel y en los Reyes Magos salen doce regalos!!!!!).

Es una excelente oportunidad para enseñar valores de generosidad y para que aprendan a valorar lo que reciben. Hay casos de niños y niñas con tal cantidad de regalos que acaban valorando únicamente el número que reciben y si es más que el de sus amistades. Eso, a mi juicio, no es un buen equilibrio.

Recopilando información de distintos blogs y redes sociales (por ejemplo el blog de María Isabel)  aparecen distintas alternativas para aprovechar estas fiestas y educar en la generosidad a nuestros hijos e hijas:

  • Cuando se reciben los regalos de navidad que elijan entre los antiguos juguetes que aún estén en buen estado para regalar a quienes no tienen recursos
  • Limitar a un regalo por familia cada vez (puede ser por familia completa, por vivienda, etc. esto es difícil de organizar así que hay que buscar lo más factible)
  • Si tienes muchas amistades o familia puedes quedar en una casa y ahí entregar regalos para todos, por ejemplo dos regalos por niño o niña independientemente de la cantidad de familiares
  • Quedar un día con las amistades del vecindario o del colegio para jugar juntos con los regalos de los demás

Espero que os sean útiles estas ideas y que estas fiestas sirvan para que cada vez tengamos un poco más de generosidad