Una de las habilidades de un buen coach es su capacidad de generar conversaciones transformadoras. Y esta capacidad está muy presente en los auténticos líderes.

Esta semana he realizado varias sesiones de equipo, entre las que destaco un Team building con un equipo extraordinario de personas. Reimos y nos divertimos muchísimo; y ellos querían conocerse más allá del trabajo. Estaban deseosos de saber quiénes eran de verdad, más allá del rol que tenían en la empresa. Sabían que eso les podía ayudar a relacionarse de otra manera, a avanzar en su relación como equipo y tener un rendimiento excelente.

Mi socia Gemma Mateu y yo generamos el espacio para que pudieran hacerlo y se produjo la magia. Compartieron momentos de su vida que les habían marcado; y mejor aún: compartieron la emoción que acompañaba esos momentos. Todos atentos, desde el respeto y admiración por la valentía y generosidad puesta en juego por todos. Disfrutamos con sonrisas y lágrimas de la esencia de cada personas. Estoy seguro de que su relación ha dado un paso de gigante, esas conversaciones provocaron la transformación.

¿Cuál es la clave para que ocurra? Lo contaré con lo que viví el pasado jueves:

Fui a la escuela de mis hijos para contarles a qué me dedico. En vez de hablarles de coaching y clownching preferí contarles qué hace un clown de hospital, la gran labor que realizo gracias a Irrikiclown (esta semana hemos recibido varios premios, como el otorgado por Teva). Tras divertirnos les conté que el clown escucha mucho y les pregunté qué se necesita para escuchar: Markel, de 8 años, respondió rápido y sin dudar: ¡silencio! Sólo es eso.

Te propongo que practiques con tu ser más querido. Mírale con ternura, curiosidad, respeto por su libertad y pregúntale lo que te interese de verdad saber. Te propongo empezar por ¿Qué te gustaría que pasara en nuestra relación? Y luego deja silencio. La primera respuesta suele ser «no se», «qué cosas preguntas» o similar; normal, puesto que son preguntas a las que no estamos acostumbrados. La transformación es un cambio y como tal asusta, aunque signifique cambiar a mejor. Si la respuesta no llega te sugiero insistir y probar con «Y si lo supieras ¿Qué sería?» y de nuevo silencio.

Te sorprenderá el resultado y si no funciona te devuelvo el dinero 😉

¿Qué relación te gustaría transformar?

 

Esta semana el bonus es la acumulación de festivos. Aprovéchalos para tener conversaciones transformadoras!