El sábado me encontré con un amigo de la infancia, Andoni, y me contó algo que me hizo pensar. Llevo buscando respuestas desde el sábado. No las encuentro. Y lo comparto aquí para lanzar la pregunta al mundo a ver qué vuelve.
El caso es que tiene un amigo que hace poco invirtió bastante dinero en remodelar un bar. Con un crédito, ayuda familiar, sus ahorros….vamos, una apuesta. Y ahora está cerrado y sin poder trabajar, otra vez.
Andoni me contaba que justo antes de cerrar pasó por el bar, quería entrar y decirle algo. Y no se le ocurría qué. Sabía que al preguntarle “¿Qué tal estás?” se echaría a llorar. Finalmente no encontró respuesta y pasó de largo. Aún sentía algo de vergüenza por ello. Le llamó a un amigo común para contárselo y éste le dijo que a él le había pasado lo mismo el día anterior.
Traté de darle una respuesta, proponerle algo que decirle a su amigo. Me empezaron a venir varias preguntas:
- ¿Qué le dices a alguien que ve cómo el proyecto donde ha puesto toda su ilusión se va a la mierda?
- ¿Qué le dices a alguien que siente que lo está perdiendo todo?
- ¿Qué le dices a alguien que no puede pagar la hipoteca o apenas llega a fin de mes?
- ¿Qué le dices a alguien que ha perdido a un ser querido?
Yo qué se. Lo siento, no se me ocurre nada. Y me genera algo de tristeza. Pienso lo que me gustaría que me dijeran a mí, tampoco lo veo claro. A tí ¿Qué te gustaría que te dijeran?
Y pienso que a veces el silencio no es malo. A veces no es tanto el qué decir sino que vale simplemente con estar.
Si eres de esas personas que se está viendo afectada directamente por esta situación y lo estás pasando mal a mí me ha ayudado escuchar esta charla. Muy sensata. Espero que te guste.