Liderar qué palabreja más esquiva. Y respirar, algo que todos hacemos ¿Se nos puede olvidar respirar? Algo tan sencillo y es de lo que más trabajo en mis sesiones de coaching.
Para despedirme hasta Septiembre os dejo aquí este breve cuento que habla de liderar y respirar.
Un joven directivo ansioso de conocimiento acudió a un sabio pidiendo consejo para liderar mejor y tomar mejores decisiones. El joven le lanzó la pregunta y esperó nervioso la gran respuesta, algo que condensara todo el conocimiento y le sirviera para poner en práctica rápidamente y continuar su exitosa carrera.
Al cabo de unos minutos empezó a impacientarse:
- Y bien, anciano ¿Qué más debo saber para liderar mejor? Quiero tomar las mejores decisiones en cada momento. Quiero ser el mejor líder posible.
- El sabio permaneció en silencio, observándole. El joven empezó a pensar que perdía el tiempo y se planteó marcharse. Justo cuando se disponía a dar media vuelta el anciano le habló
- No te olvides de respirar
- ¿Qué?
- Que no te olvides de respirar – repitió el anciano, cansado
- ¡Claro! si no me muero – miró incrédulo al sabio que asintió con la cabeza
- Y ¿Qué más? – el anciano simplemente derivó su atención a otros asuntos
- No me….¿Esto es todo? – el joven comenzó a enfadarse visiblemente- me habían hablado maravillas de tí y me sueltas esto…tiene que haber más, para liderar mejor no puede servir esta chorrada. Esto ya lo hago, mira ahora mismo estoy respirando….
Ahí terminó la conversación. Y el directivo se marchó y siguió su camino de éxito. Su carrera siguió progresando, en puestos de cada vez más responsabilidad, ganando más dinero, con más reconocimiento y fama y también con mucha más cantidad de trabajo y estrés. Hasta que sucedió lo inevitable: un episodio agudo de ansiedad que le dio un buen susto.
Le recomendaron actividades que probó: yoga, pilates, meditación….y en todas escuchaba lo mismo “concentra tu atención en la respiración”. Entonces entendió que llevaba años pensando que respiraba, lo hacía de manera inconsciente, y lo hacía mal, entrecortado, incrementando la sensación de estrés y provocando sobresfuerzos a todo el organismo. Entonces lo entendió, el consejo de aquel sabio era lo que necesitaba en aquel momento.
A veces no estamos preparados para entender. Cuando estamos preparados aparecen los maestros así que cuando tengas cerca un maestro escúchale. Seguro que te ayuda a ser un mejor líder.
Y de regalo este vídeo que he grabado con el equipo de APD Formación In Company para apoyar a los líderes en la generación de confianza y compromiso en sus equipos.
Espero que te guste, disfrutes de las vacaciones y, sobre todo, NO TE OLVIDES DE RESPIRAR!!